Todos tenemos por algún rincón un ordenador de sobremesa o portátil que utilizamos de vez en cuando para realizar determinadas tareas. En mi caso tengo un portátil Acer Aspire 3003LMi basado en un procesador AMD Sempron +3000, 512 MB de RAM y Windows Xp que utilizo para aquellos programas que aún no están disponibles para Mac OS como el CISCO Configuration Assistant, conexión a consola a través de puerto serie a múltiples dispositivos de red y hasta hace poco el cliente VMware.
El caso es que me preguntaba de qué forma podría incrementar el rendimiento de este portátil para alargar la vida de este viejo ordenador con una inversión inferior a 60€. Para ello me decanté por ampliar la memoria RAM y sustituir la unidad de disco original por una de estado sólido.
Ampliación de la memoria RAM.
La cantidad máxima de memoria RAM que admite este modelo son 2GB distribuidos en dos módulos de 1 GB del tipo DDR-333 PC2700s. Sin embargo el precio de estos módulos es muy alto por lo que tuve que decantarme por dos módulos de 512MB cada uno por un total de 10,94€ más 2,5 € de gastos de envío.
Sustitución del disco duro.
Este viejo ordenador utiliza un interface ide/PATA para el disco duro por lo que necesitaba una unidad SSD con este tipo de interface. Este tipo de unidades antiguas no son fáciles de encontrar y aún menos en estado sólido. No obstante encontré una unidad que podría servir en Amazon. Se trata de una unidad SSD con interface PATA que podría encajar como un guante en el viejo ordenador de la marca KingSpec de 2,5″ ide/PATA SSD. Para ceñirme al presupuesto inicial me decanté por la unidad de 32GB por 44,28€ + 2,99€ de gastos de envío, puesto que el tamaño del disco original eran 40GB tampoco debería de notar mucha diferencia.
Llegó la hora de la verdad.
Antes de realizar ningún cambio al equipo instalé un software para hacer un test de rendimiento. Una vez sustituida la memoria y clonado el disco duro volví a pasar el mismo test y aquí podéis ver los resultados:
Benchmark antes del upgrade
Benchmark después del upgrade
Si bien el en el resultado global no hay mucha diferencia en cuanto a la puntuación de las pruebas (222,4 frente a 238,8) si nos fijamos en el rendimiento de la memoria (245,7 frente a 271,1) vemos que hemos mejorado algo. Pero si hay algún valor que destaca sobre los demás es el rendimiento de disco (177,6 frente a 365,8). Con el nuevo disco ssd obtenemos un 48% de mejora en el rendimiento.
Si bien es verdad que, según el test, apenas hemos mejorado un 9,3% el rendimiento global del equipo si que puedo decir que en lo que a experiencia de usuario se refiere el ordenador ha mejorado bastante y sirva de muestra el tiempo que tarda el sistema operativo en cargar 17 segundos frente a los 38 que tardaba originalmente. Ahora las aplicaciones se abren de más rápidamente y, porqué no decirlo, la batería parece que dura un poco más.
Después de esta prueba puedo afirmar sin lugar a dudas que, con apenas 60€, podemos alargar la vida de nuestro viejo ordenador portátil o de sobremesa un poco más.
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